Todos hemos oído hablar acerca de la importancia que tiene el uso del color en casa.
Porque, más allá de las tendencias y estilos decorativos, el color es un elemento que puede aportar diferentes sensaciones, y efectos en nuestro estado de ánimo, según empleemos uno u otro.
La verdad es que la decoración juega un papel importantísimo a la hora de que nuestra casa nos aporte bienestar y felicidad. Son muchas las corrientes y estudios que enseñan a crear ambientes que nos sean lo más agradable posible. Por ejemplo, el Hygge nórdico que nos indica cómo crear entornos acogedores. O el Feng Shui que aporta un adecuado flujo de energía en los espacios que nos rodean.
De igual modo, la cromoterapia busca aportar felicidad a través del uso del color en el hogar.
Partimos de un detalle que, frecuentemente, queda en el olvido. Y es que no todos los colores son recomendados en todas las habitaciones y ambientes de una vivienda. ¿Lo sabías?
Precisamente, porque usar en casa los colores adecuados es una forma sencilla y económica de hacer de tu vivienda un lugar de lo más apetecible, para ti y tu familia, hemos creado este artículo. En él, vas a encontrar pequeñas ideas deco para que hagas del uso del color el mejor aliado de tu casa.
Cómo hacer un buen uso del color en casa
Como dijimos al principio, los colores tienen efectos psicológicos que se manifiestan en nuestro entorno y, por tanto, en nuestra vida diaria. Por esa razón, la elección de tonalidades adecuadas para cada rincón y habitación es tan importante.
1 – Azul para un ambiente fresco y relajado
El color azul ayuda a crear un ambiente acogedor, tranquilo y fresco en el estado de ánimo. Por lo que suele utilizarse, con frecuencia, en dormitorios por su efecto relajante y sereno. Si decides incluirlo en tu habitación, te animamos a escoger un tono lavanda o azul cielo claro. Haz la prueba y verás cómo mejora tu descanso.
Además, se considera un color que hace que se perciba más fresco el lugar en el que se incluya. Por eso, es uno de los preferidos para casas de verano.
2 – Verde para favorecer la concentración
El verde es un color que aporta tranquilidad y armonía. Y, sin duda, es el que más nos conecta con la naturaleza. Y está lleno de connotaciones positivas como seguridad, esperanza, optimismo y buena suerte. Pero, también ayuda a potenciar la concentración, lo que lo hace perfecto para zonas de trabajo, estudio u oficina.
3 – Rojo para «estar alerta»
Toda la gama del color rojo es un estímulante para el estado de ánimo. Por lo que es perfecto en espacios en los que se esté bien despierto y atento. Por ejemplo, en cocinas y comedores. Eso sí, ten en cuenta que visualmente hará la habitación más pequeña, por lo que no es conveniente abusar de él en las decoraciones.
4 – Naranja para llenar tu casa de energía
El color naranja es pura vitalidad. Cálido y alegre, según los expertos, estimula el apetito y la actividad. Invitamos a usarlo en los meses del año más fríos para aportar calidez a tu hogar. Sobre todo, en las habitaciones más «sociales» como el salón, comedor, sala de estar o la cocina.
5 – Amarillo para buenas vibraciones
Si hay un color que transmite energía, ese es el amarillo. Pura vida, animado, fresco y siempre positivo. Este color primario será perfecto para darle un toque de optimismo a tu cocina, sala de estar o comedor.
Y, desde aquí, te animamos a perderle el miedo a este color. La verdad es que ha tenido «mala fama» durante mucho tiempo. Pero, si haces la prueba, seguro que te sorprenderá gratamente el resultado.
6 – Marrón para grandes combinaciones
El marrón es el color de la tierra. Típicamente otoñal y de base, funciona casi como un neutro. Y, aunque a priori puede parecer un color un tanto triste y apagado, te aseguramos que combinado con otros colores como rosa, naranja, amarillo o azul, crea ambientes de lo más creativos y dinámicos.
Aprovecha para incorporarlo en tu casa no solo en muebles de madera sino en todo tipo de detalles. Tienes nada menos que 95 tonos diferentes para elegir entre toda la gama de marrones. Prueba y comprobarás cómo te permite crear ambientes cálidos e intemporales.
7 – Blanco para ambientes luminosos
El blanco es el color que transmite pureza, limpieza y perfección. Ningún otro color transmite tan bien como este tanto la luz natural como la artificial. Y por eso es, actualmente, uno de los más usados de la casa.
Este color es la base de la decoración de estilos tan diferentes como el estilo mediterráneo y el escandinavo. Ambos se caracterizan por la luminosidad que transmiten y los acogedores ambientes que crean. Pero mucho antes de que el color blanco triunfase en las tendencias de decoración, ya era usado en paredes, molduras, suelos y techos.
Un consejo: es versátil y agradable pero no abuses de él ni crees ambientes monocromáticos. El resultado sería demasiado frío e impersonal. Prueba a combinarlo con otros tonos y colores. ¡Comprobarás su infinita versatilidad!
8 – Negro para aportar elegancia
Sin ningún tipo de duda, el negro es el color de la elegancia y el misterio. Aporta sofisticación a cualquier ambiente. E, incluido en su justa medida, puede crear decoraciones espectaculares.
Con este versátil color, podrás hacer juegos de contrastes de lo más interesantes. Desde combinarlo con distintos tonos de la gama de grises, hasta llegar al blanco o beige. O bien, mezclarlo con otros colores más vivos como rojos, amarillos, naranjas, verdes y azules. Como ve… ¡admite de todo! Eso sí, ten en cuenta que el negro puede dar sensación de reducción de espacio. Por lo que te sugerimos controlar su uso y no recargar la habitación en la que tenga protagonismo.
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